Mi reina de oros, porque eso es lo que vale ella; es más valiosa que el tiempo, porque todo el tiempo con ella es poco.
Se encuentra revoloteando por mi cabeza, haciendo suyo cada rincón de mi ser, conquistando cada pedacito de mí para coserme.
Dejemonos de metáforas y hablemos claro, las mariposas nunca fueron suficientes estando tú delante para desafiarlas con tu mirada; porque cada vez que la clavas en mí, un escalofrío recorre todo mi cuerpo y no necesito más señales para saber que eres tú.
Dame todo tu veneno, no solo lo bueno, y te demostraré que no hay nada más real que la magia que recorre por mis venas; porque si estoy contigo, muero por ti; que si los monstruos nos atacan, me quedaré a tu lado para derrotarlos juntos.
No temas a desafiar a las estrellas, tú ya eres una de ellas, brillas como si te fuera la vida en ello, por fuera y por dentro.
Tal y como eres no necesitas nada más para hacerle frente a los huracanes, para mí tienes una galaxia en tu ser, mujer maravilla.
Mi musa, mi verso más sincero, no te hagas recuerdo y sigue haciéndote realidad -en mí, siempre-.
martes, 9 de enero de 2018
Eres tú.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario